Fácilmente transportable y vendible en todo el mundo (certificados GIA-HRD-IGI reconocidos internacionalmente).
No existe una alternativa a la posibilidad de transportar personalmente de una parte a otra del mundo valores ingentes con dimensiones de pocos milímetros. Por ejemplo un diamante de gran calidad del valor de 1 millón de euros puede tener un diámetro de solo 13 centrímetros.